El Nacional ganó apretadamente.

Con la victoria de El Nacional, es cuarto en la tabla y acabó el invicto del Deportivo Quito.

El Nacional evitó que Deportivo Quito siga subiendo. El Nacional aún tiene posibilidades.

Una terrible falta de Isaac Mina sobre un jugador de El Nacional, en el minuto 49, fue determinante para que Deportivo Quito tuviera su primer traspié en el hexagonal final. Luego de su expulsión, Carlos Quiñónez marcó el 1-0 (54’) con el que ganó el cuadro militar anoche al líder.

Fue un balde de agua fría que cayó sobre los hinchas chullas en la helada y nublada noche capitalina, en un cotejo que hasta ese instante, era parejo.

Ambos conjuntos aplicaron un esquema 4-4-2. Ninguno cedió espacios y la marcación de lado y lado fue celosa por todo el campo de juego. Por ello, el primer tiempo tuvo llegadas de peligro en los dos pórticos y no hubo un dominador absoluto.

A los 20 minutos, el primer susto lo metió el lateral por izquierda Erick de Jesús, quien tras recibir un pase de Walter Ayoví, remate apenas desviado sobre el pórtico de Geovanni Ibarra.

En la contra, en el minuto 22, el turno fue para el aún líder. Oswaldo Minda metió un centro rasante, que llegó a los pies de Luis Fernando Saritama. El mediocampista procuró colocar con sutileza al ángulo izquierda de Rixon Corozo, pero el balón no tomó el efecto adecuado.

De esta manera, los cerca de 7 000 espectadores que llegaron al estadio Atahualpa disfrutaron de un partido de pronóstico reservado. Tanto del DT ecuatoriano Carlos Sevilla como el argentino Jorge Célico, procuraron arrimarse sobre el arco contrario, pero sin descuidar sus defensas.

Los contragolpes y las apariciones individuales eran claves en este cometido. Deportivo Quito tuvo en Saritama a su mejor lanzador y en Minda a su mejor colaborador. Mientras que el reflejo militar eran Wellington Sánchez y Ayoví, en su orden.

En el minuto 36, el cuadro chulla dispuso otra opción más, en los pies de Mandra, quien remató de volea un nuevo centro de Minda desde el costado derecho.

La tónica fue similar en el inicio de la segunda etapa, pero con la intención azulgrana de buscar con mayor ambición del pórtico rojo. Eso se evidenció con el ingreso del volante argentino Martín Andrizzi. No obstante, Sevilla no contó con que Mina vería la tarjera roja en el minuto 49, lo que tiró a la basura sus planes.

Por ello, el estratega corrió al lateral derecho Franklin Corozo como zaguero central, junto con Luis Checa. Y en ese costado puso a Minda. Pero mientras las piezas se acomodaban en sus nuevas posiciones, justamente desde la derecha nació el centro de Erick de Jesús, que Carlos Quiñónez remató con potencia dentro del área chica, ante el asombro y la ira del técnico ecuatoriano (54’).

Fue un gol que puso en aprieto a los chullas. Sevilla iba a recomponer su defensa con el ingreso de Luis Tenorio, pero de último momento se arrepintió. Su convicción por empatar pudo más que el aspecto táctico.

Pese a que estuvo con un jugador menos, el Quito procuró por todos los medios de obtener el empate. Se acomodó con tres zagueros y martilló a los ‘puros criollos’ con centros y remates de media y larga distancia.

En el minuto 66, Checa tuvo su chance en un centro de Saritama. El taquito le salió débil dentro del área. Cinco minutos más tarde (71’), el colombiano Léider Preciado puso de pie a los hinchas chullas, que no dejaron de alentar pese a la derrota. Remató sin fuerza el centro de Andrizzi.

Y en el minuto 87, el mismo Andrizzi cabeceó en el área chica, pero el meta Corozo atajó en extremo en dos ocasiones el tiro.

Tal fue la desesperación azulgrana de empatar que terminó sin volantes de marca. Sevilla se jugó a ‘matar o morir’ con el ingreso, en los minutos finales, del ex militar Ebelio Ordóñez.

Finalmente, El Nacional se llevó una victoria importante como local y derrota al invicto del Deportivo Quito.